Del Destimo de los Hombres

por el Dr. Calacolindo


El Dr. Calacolindo repudia la autoría de estos escritos, según él, hechos en momentos de exaltación canonista, y recomienda a los lectores hacer caso omiso de lo que en ellos se pueda sugerir.

En el Silmarillion, durante la creación, se dan a conocer los Hijos de Ilúvatar, Elfos y Hombres. Los primeros, inmortales, están sujetos a la canción y tienen un destino forjado del que no pueden huir. En cambio, los hombres, al recibir el Don de la Muerte, reciben el don también de la libertad para elegir el curso de sus vidas, y se dice, no están ligados a la canción.

Aquí hay algo que no se entiende: ¿cómo puede un hombre elegir libremente su destino rodeado de gentes con un destino prefijado? Por ejemplo, si el destino de Gwindor era encontrar a Túrin, y era invariable porque Gwindor era un elfo, el destino de Túrin, obligatoriamente, debe ser encontrar a Gwindor, cosa que hace que el destino de Túrin, hombre, esté también forjado de antemano.

Si recordáis, se dice que el destino de los elfos está ligado a la canción, i que el de los hombres no está ligado a esta. Pero, ¿está el destino de los hombres ligado a la visión de los Ainur? Según el Ainulindale, la visión llega hasta el declive de los elfos y el poderío de los hombres. Si no hubiera elfos en el mundo, los hombres si podrían escoger su destino libremente, porque no estarían sujetos a ninguna fuerza exterior, o sea: a falta de elfos, pueden ser completamente libres.

Eso puede significar que los hombres no están sujetos a "toda" la canción, sino solo a la parte de la visión, la que conocen los Valar. Otra posibilidad sería que por culpa de la "libertad" de los hombres, cambiara el destino de los elfos, pero parece improbable porque, por ejemplo, Galadriel advierte a Thingol de la futura llegada de Beren, y sucede así, sin cambiar el destino de Thingol, pero forzando el de Beren, cosa que reafirma aun más la anterior suposición.

Si todo esto fuera cierto, se podría asegurar que los hombres no fueron libres para escoger sus destinos hasta la partida de Celeborn de la Tierra Media, cuando en el mundo solo quedarían criaturas que no están sujetas a la canción, sólo a la visión, que ya habría acabado.

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